El presidente de la AMIA, Guillermo Borger, expresó su fuerte repudio a la presencia de simbología nazi durante una reciente manifestación realizada a Plaza de Mayo.
“Es totalmente reprochable y abominable la presencia de estos símbolos nazis”, afirmó el titular de la institución comunitaria en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
Borger remarcó que “ver los símbolos nazis en cualquier tipo de reunión es repudiable y con más razón en la Argentina”.
“La Argentina forma parte de la International Task Force (el grupo dedicado a la rememoración, investigación y educación del Holocausto)”, argumentó el dirigente comunitario.
Asimismo, Borger resaltó que la Argentina es el único país latinoamericano que forma parte de este grupo internacional.
“Así que es absolutamente contradictorio que en un país que es ejemplo para el mundo por ser el único en Latinoamérica integrando a esta comisión, por lo que resulta doblemente doloroso”, enfatizó.
Además, el presidente de la AMIA señaló que este hecho también es doloroso porque se enfrenta a otro grave momento de la historia cuando el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, aprovecha el escenario de la Asamblea General de la ONU para cargar contra el sionismo, la comunidad judía y el Estado de Israel.
Incluso, Borger consideró que los símbolos nazis vistos el pasado 13 de agosto durante la marcha a Plaza de Mayo son un ejemplo de la “banalización de la Shoá”.
Como hijo de sobrevivientes del Holocausto, Borger se mostró “doblemente sensible” frente a lo ocurrido en Buenos Aires. Al tiempo que apuntó que su mamá, quien lleva estampados los números del campo de concentración que estuvo durante la Segunda Guerra Mundial, “es testigo viviente para rebatir esta consideraciones negacionistas”.
“Esto es absolutamente repudiable y es probable que se esgrima este tipo de símbolos desde la ignorancia porque frente a semejantes hechos del momento más aberrante que sufrió la humanidad y, por más disenso que uno pueda tener, no existe nada que pueda justificar la presencia de esos símbolos”.
Durante esa protesta convocada en reclamo de mayores medidas de seguridad y en rechazo a las restricciones a la compra de dólares, también se puede ver la utilización del tradicional pañuelo de las Madres de Plaza de Mayo como una burla contra el emblema de la resistencia pacífica contra la dictadura.
Otras voces de repudio
Por su parte, el vicepresidente de la DAIA Julio Schlosser también hizo llegar su repudió a la presencia de esvásticas en la protesta del pasado 13 de septiembre.
A través de un comunicado, el Nuevo Modelo Comunitario (NMC), que lleva a Schlosser como candidato a presidente de la DAIA, rechazó la utilización de simbología nazi en la protesta.
“La exhibición de Esvásticas en espacios públicos de nuestro país supone una indudable provocación para la memoria de millones de víctimas y sobrevivientes de la Shoá. En este marco, el NMC insta a la sociedad en su conjunto a evitar la utilización de estos signos desdeñables, sólo asociables a la etapa más trágica de la historia humana”, transmitió la organización en un mensaje que también lleva las firmas de Waldo Wolff y Jorge Knoblovits